Cristo amante es una colección de poemas centrados en la exploración homoerótica, herética y pagana del cristianismo y de la liturgia romana. Cristo amante es el esposo y, por lo tanto, la salvación no mediada, el fuego siempre ardiente y el agua siempre fresca. Cristo amante es el antiguo Cristo de los gnósticos y de las desaparecidas sacerdotisas cristianas.
miércoles, 19 de junio de 2013
Abandono esta casa
[1] Adiós
le digo a esta casa y a ti también---
adiós a los pasos---
a mi boca sobre tu espalda.
¿Puedo despedirme de esta casa
como me despido de ti---
con los labios o la mejilla?
El niño agita la mano.
El hombre da la espalda.
El amante recoge las lágrimas con las manos crispadas.
A las personas se les dice adiós con el cuerpo,
¿con qué me despido de esta casa?
[2] Porque puedo dejar atrás al paisaje,
al mar,
al árbol,
puedo no verlos ni tocarlos
ni llamarlos por su nombre---
pero esta casa la llevo,
la cargo,
la llamo en silencio y en amanecer---
la nombro con la extensión de tu espalda de soldado,
de tu boca como puño,
de tus ojos como infiernos---
Al paisaje lo abandono y es simple,
a ti te abandono y es justo,
¿pero cómo abandono esta casa?
¿cómo me abandono?
[3] Adiós
niño de sangre
Adiós
asesino de niños
Adiós
muros rojos
Adiós
Jaime
Adiós
niño de llanto
Adiós
niño muerto
Adiós
muros blancos
Adiós
Francisco
Adiós
dormitorio que tiembla
Adiós
comedor de hambruna
Adiós
sillones de horror
Adiós
ventanas tapiadas
Adiós
gritos en alacenas
Adiós
cama de putos
Adiós
Jaime y Francisco.
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