Para los antiguos cristianos gnósticos el dios del Antiguo Testamento, furioso, vengativo, guerrero, celoso, era un dios falso, el demiurgo, que explicaba todo el mal que existía en este mundo. Para ellos, Cristo y la diosa Sabiduría (gnosis), eran los enviados del verdadero dios/diosa y señalaban el camino hacia la salvación. Los cristianos gnósticos, exterminados por la iglesia católica medieval, pensaban que, por lo mismo, la salvación estaba en el conocimiento intuitivo de ese camino personal. Ellos creían que esa semilla pequeña de sabiduría nos convertía a todos en dioses y diosas.
Cristo amante es una colección de poemas centrados en la exploración homoerótica, herética y pagana del cristianismo y de la liturgia romana. Cristo amante es el esposo y, por lo tanto, la salvación no mediada, el fuego siempre ardiente y el agua siempre fresca. Cristo amante es el antiguo Cristo de los gnósticos y de las desaparecidas sacerdotisas cristianas.
lunes, 22 de marzo de 2010
Cristo y el dios furioso
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