A los cuatro puntos donde apunto la mirada
extiendo mis mantas y mi casa se amplía.
La diosa vestida de estrellas hace el arco sobre el mundo
y yo soy el falo de este hombre extendido.
A los cuatro puntos donde apunto la mirada
extiendo las llamas y esta danza comienza.
La diosa levanta el brazo y quiebra la cadera,
alza la pierna y su mano, es cinco diosas candentes.
A los cuatro puntos donde apunto la mirada
el mar tiene espuma para uno y mil nacimientos.
La diosa tiene párpados geométricos como útero.
La diosa atrae amantes a la costa de mi cama.
A los cuatro puntos donde apunto la mirada
está mi casa con ventanas y puertas amables.
La diosa es la niña que porta el bálsamo de reyes,
ella me unge con mi nombre y yo soy el hombre
que elige el Tarot y el camino ya pisado por Cristo.